Para mi lo son. Esas cositas que hacen de las estancias donde se encuentran, sitios mas acogedores, con encanto. Y es el caso, para mi, de esta lamparita:
Me la regaló mi abuela; no supo decirme cuanto tiempo tiene, pero mínimo 40 años. Cuando me la enseñó...me enamoré. Flechazo. Así queda puesta:
Si os fijais hay un nuevo cojín en la cama (ya no pongo mas!!). Lo hice anoche. No tengo ni idea de coser, ni máquina para hacerlo, pero con paciencia, se pueden hacer milagros. Pronto forrare el asiento de una silla que encontré en la calle, con la misma tela.
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